domingo, 27 de diciembre de 2009

Reallityza la vida


Apología de mi misma... etimológicamente apol-ojética de mi misma, de ojete, de ano, de mi propio culo, a ver si en ésta intento salvarlo. Tengo un montón de sentimientos acumulados de estos días, y os digo que es realmente complicado ponerles las palabras precisas a cada uno. De hecho diría que aún tengo el mismo nudo en la boca del estómago, que no me deja sentir, ni pensar, ni escribir, ni hablarte...

Supongo que en este momento es mucho más sencillo REALLITYlizar la vida, hacer como que es la Milá quién la cuenta, hacer sangre de todo, maximizar y dramatizar al extremo, buscar en los demás o contar con los demás, incluso con los que nunca pensaste que podías hacerlo aunque puedan joderte, apolojéticamente también... digo, es preferible eso que afrontar la vida real, echársela a la espalda y tirar con ella hasta dónde nos lleve. Pienso que es imprescindible, contar con una misma y tenerse a una misma a favor, para luego valorar, de verdad, el contar con los demás. Creo que es una manifestación más del amor propio, y que en realidad la dependencia del otro, de lo que el otro piense, me diga, o me convenza que debo sentir, es una mera manera de tapar el vacío que uno mismo tiene de si mismo.

Por eso me gusta tanto la apolojética. La apolojética y curarme mis heridas... suave, despacio, poco a poco... pero hacerlo yo misma, nada de puntos de pegar que aunque estéticamente queden mejor, mi madre siempre decía que no valían para nada. Y es que a día de hoy puedo mirarme la barbilla y ver en mis siete puntos, que una vez fui niña y viví de ilusiones (igual que el tonto los cojones), y pensé que podía volar. Estaba convencida de ello y de hecho practiqué hasta abrirmela contra el suelo. Pues lo mismo. Nada de puntos de pegar. La próxima vez que haga recuento de cicatrices, quiero verme una encima de la teta, directamente proporcional, en tamaño (de la cicatriz, no de la teta) a ti o al lugar que has ocupado ahí.


miércoles, 16 de diciembre de 2009

"No es la razón la guía de la vida, sino la costumbre"

Ésto lo decía Hume. La idea que subyace en realidad viene a ser que, el conocimiento es fruto de costumbres, de la religión, de las creencias..., en la que cada individuo se ha educado, vive y ha enriquecido su persona a raíz de experciencias puntuales.
Entonces, si el conocimiento es función de... o está formado por un conjunto de ideas de rango inferior, y éstas a su vez están condicionadas por un montón de factores ideológicos, culturales... entonces, ¿no existe una idea única y separada de las demás del conocimiento?.
Por ejemplo, cuando decimos, "yo a tal persona la conozco como si la hubiera parido". En el fondo, no existe el "conocimiento" como tal de la misma, no existe una percepción objetiva de su manera de ser. La estoy percibiendo yo como quiero (como se o como me han enseñado), en base a unas ideas previas (educación, prejuicos, concepto de ser normal, ser raro, ser simpático...) que son las que nos forman, determinan y condicionan esa manera nuestra de percibir.
Hay un tópico que dice, que todos somos diferentes. Siempre lo he interpretado, desde la misma perspectiva, como que nunca encontraremos dos personas física o psicológicamente idénticas, está claro que no. Pero en realidad, yendo más allá, y reflexionando sobre ésto, una misma persona, es una persona distinta si son dos personas las que la están "percibiendo"; y pese a que haya un acuerdo (por ejemplo en que es agradable), la idea de agradable no es la misma para una y otra persona, pues el punto de partida para ambas es distinto. Y aunque fuésemos capaces de propiciar una misma infancia, una misma educación... las mismas "condiciones de contorno" para ambas, la idea de agradable que ambas perciben seguiría sin poder ser la misma, pues la idea inculcada de amabilidad, en realidad, se distorsiona por la experiencia y por las situaciones puntuales que ambas vivan.
Y sí, cualquier excusa es buena para no estar ahora mismo estudiando.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Esto no es una entrada cualquiera, quizás sea una salida, o una vía de escape

Hace siete años podía jurar y perjurar que la distancia más corta entre dos puntos era la línea recta. Hace cuatro, me dio por explicarme que estaba equivocada y que en realidad es "la geodésica". Hoy, menos lista pero más inquieta que entonces, me basta con lo que decía, de siempre, Luis Eduarde Aute... y es que la distancia más corta entre dos puntos es la música. Y no hay ley, ni postulado que lo sostenga, pero me lío la manta a la cabeza y hago constar aquí que fruto de mis experiencias puramente empíricas se que ésto es cierto.
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martes, 8 de diciembre de 2009

¿Título? No pongo título porque nunca haría un film de mi vida, tampoco pasaría a los anales de la historia de cine. Anales viene de año, no de ano.

Y después de todo no quedó más que el vaho en los cristales, el vapor húmedo de la sublimación* del cuerpo y las huellas de sus curvas que se borran al estirar las sábanas.

* Aberración física, pero poéticamente permitdo.

jueves, 3 de diciembre de 2009

"How to save a day"

No soy de palmaditas en la espalda ni tampoco de cumplidos, me gusta llamar a las pifias, mierdas y a los logros, trabajo. No soy supersticiosa, ni tampoco creo en las casualidades, más que eso me gusta pensar en que una misma es responsable de su situación y circunstancias; si bien es cierto, que en algunos casos un golpe de suerte puede alegrarte el día. Desde niños caminamos en una dirección, nosotros elegimos el camino... hacia el pasotismo y la mediocridad caminamos solos. Nadie nos limita a exigir, ni a exigirnos, los prejuicios y las comodidades las instauramos nosotros en nuestras propias vidas. Nada es realmente injusto, si no sólo una manera de justificarse. No entiendo los fracasos como las caídas que no hacen daño, ni como meros tropiezos de los que hay que levantarse y aprender, y crecer. Los fracasos jodenquetecagas y nos forjan el caracter.
Estoy mosqueada. Estoy de malas hoy, y no sólo porque el fotógrafo me haya sacado no demasiado bien en la foto de la orla (yaaaa lo seee ninguna culpa tiene el pobre hombre, hay lo que hay), desde ese momento, mira tú que tontería, se me ha torcido un poco el día. A ver si de alguna manera lo podemos arreglar...


domingo, 8 de noviembre de 2009

Como hablar de "proyectos" es demasiado snob, nos gustan más los sueños o cumplir expectativas.


Y cuando llegue tu momento, y aunque te tiemblen las piernas, salta. Porque la vida a veces da vértigo y pese a ello, o mismamente sirviendo eso de excusa, solamente hay que agarrarse* a alguien para que se borren los miedos y el canguelo de volver a empezar o de empezar de nuevA.
Esa es la actitud.
*Entendiendo agarrarse en un sentido bidireccional, el de tomarse las manos mutuamente y no dejar temblar ni ser temblado...

miércoles, 4 de noviembre de 2009

No sabes lo que me gusta verte contento

Después de todo, sigue pareciéndome cuanto menos llamativo, que sigas ahí para sacarme las castañas del fuego cuando no se arreglármelas sola.

Y no te digo todo lo que sigue significando eso para mi, sigo siendo la misma dura de antes, ni aunque te cabrees conmigo y bajes la ventanilla para increparme porque nunca te doy las ¡GRACIAS!




Porque luego dices que nunca escucho tus recomendaciones y aunque tienes razón, a veces (y todo) suenan bien...






lunes, 12 de octubre de 2009


Me gustan las estanterías desordenadas, llenas, con muchos colores...
Es algo en lo que me fijo, (en realidad, todos solemos fijarnos) cuando entro por primera vez en un cuarto, casa, habitáculo nuevo, desconocido para mi. Decía que me gustan llenas, desordenadas, caóticas, con muchos colores, me encantan porque es como si emanaran muchísima vida por los poros, como si estuvieran a punto de disparar confeti en todas las direcciones a través de las vetas de la madera, formando ángulos imposibles con el eje del estatismo dinámico de la mirada que se clava en ellas en ese preciso momento, justo en ese instante, en la cara de la gente de las fotos, de los títulos de libros, de los possits con recados atrasados...




Nota aclaratoria uno:
Quizás pienses que esta entrada es una auténtica pijada, probablemente lo sea, sí. Pero todo tiene un sentido. Hace unos meses dos personas, dos personas que no tiene absolutamente nada que ver, ni de oídas se conocen siquiera, me dijeron algo que se me quedó grabado. Me lo dijeron en contextos completamente diferentes. Para ponernos en situación, una de esas personas me lo dijo en un contexto puramente emocional; mientras que la otra persona, en un contexto puramente académico. Y claro está que la esencia es completamente diferente. La persona A me venía a decir que últimamente me agarraba a experiencias pasadas para escribir, en concreto, a situaciones puntuales de mi infancia, a recuerdos... y achacaba este "síntoma" a que veía que era ahí cuando realmente estaba segura de mis pasos, de mis sensaciones... donde sentía que no tenía nada que esconder ni ninguna explicación que dar. En el caso de la persona B, fue todo mucho más sencillo, pero lo paradójico y lo que me sorprendió es que fue en cuestión de días. B fue claro y contundente, lo que me dio fue un simple consejo, en un ensayo de lo que iba a ser una especie de examen oral. B dijo: "Capi, haz el favor de hablar en presente, quítate la manía de volver hacia atrás".

Si has tenido paciencia y has llegado a leer hasta aquí, entenderás la pijada de mi actualización... y por qué en realidad no es tan pijada como parece el haber escrito una sensación tan puntual.

Nota aclaratoria dos:
Prometo no volver actualizar con entradas que lleven libro de instrucciones. PALABRA

viernes, 11 de septiembre de 2009

domingo, 16 de agosto de 2009

Título o... sobre cómo utilizar la labia o dejarme rota

- ¿Es que te gusta fumarte todo lo que escribes?

- Pues no lo sé, pero supongo que, bueno, sí, quizás, puede ser que alguna rara vez escriba, "tal vez me gusta esfumarme de todo".

domingo, 2 de agosto de 2009

Ahora que no me oyen

Que lo que te digo yo, que los días nublaos me sientan fatal "palacabeza". Que después de tanto sol, al final me tuvo que dar algo malo al coco para que me siente aquí a escribiros.
Muy simple, venía yo en el coche, mi señor padre al volante, Jesu adormiladillo y enfurruñao conmigo (esto tras haberme portado todo el fin de semana como "lahermanabuenaquesoy"). Pues en esa texitura yo me rucurucu-rucurucu...
Quizás la cuestión sea no complicarse la vida más de lo estrictamente necesario. Porque antes de la de hoy, he sido una buscadora empedernida. ¿De qué? Pues no sé. Sigo sin saber de qué, pero supongo que todas en alguna etapa de nuestra vida, buscamos y buscamos y buscamos… y cuando creemos haber encontrado, seguimos buscando: será el inconformismo. El inconformismo y el no saber qué se quiere o cómo.

Hoy no. Hoy soy de lo más simple. Una servívora de lo más racional, que se conforma con beber, hablar y respirar. He perdido un poco la capacidad rebuscar entre letras, entre canciones, entre besos… leo y me gusta, escucho y tarareo (como puedo), me gustas y te beso… todo es maravilloso, pero nada me sugiere nada nuevo. La vida me va así, porque en cada palpito en la sien (siempre he creído que es ahí donde se nota si estamos vivos, más que en el pecho) la empujo a que vaya así… y me encanta… y me conformo. Quizás por eso ya no busque. Quizás ya no hay nada que encontrar.


lunes, 22 de junio de 2009

Taxi Lisboa

Cosas de la vida, supongo que algún día teníamos que volver...



¡Descontando días!

domingo, 7 de junio de 2009

Todo el mundo sabe que nunca pago los peajes

Yo que no sé de frases bonitas, ni de pasteleo, ni de ponerte las ganas en los labios, ni de embelesarte… te encontré, simplemente intentando terminar la canción que escribías, desacompasada y horrorosa. Eso pensaba, pero sólo era por la rabia de no poder ser yo quién la tocara para ti.


Torpes de mis formas, tampoco intentaba ponerte las ganas en las manos, ni en los labios… simplemente me bastaba robarle una sonrisa a la comisura de tu boca. Por eso, te miro, te miro mucho, para ver cuándo es que se te escapa.


Ni tampoco pretendía robarte para mí con sólo un viaje, ni traerte a la ciudad sin playas en las yemas de los dedos y a la primera de cambio… porque sé que te pierdes, y no sólo en cuestiones de tacto.


Entonces, me saqué un bono de viajes ilimitados a tu espalda, con una sola dirección de ida y nunca la misma dirección de (re)vuelta… sin rumbo, ni sentido alguno. Y descubrí el caótico tráfico de viajar en círculos, de hacer rodar los besos sobre mis propios pasos. Es lo bueno de las autopistas a tu cuerpo… que siempre aparecen curvas nuevas.

sábado, 6 de junio de 2009

Perdón por el desorden. Perdón por el barullo.

Lo que nos lima el tiempo. Es una cosa impresionante, de verdad. Todo esto viene al cuento de lo siguiente, no penséis que se me ha ido la pinza, no. Bien, anteayer noche mi padre no vino a cenar, ni a hacer la precampaña en casa. Lo cual implica que anteayer a la cena, no se habló de política en casa. Bien, como alternativa, mamá que nunca ha sido políticamente correcta, se puso a hablar mis perrerías de niña. Todavía me estoy acordando ahora de la cara de joderjoderjoder de mi hermano, no le veía las manos, pero estoy casi convencida de que papel y lápiz en mano, estaba apuntando, porque ambos cojeamos de la misma pata.
A medida que pasaba el tiempo, se me iban saltando los colores. Sé que cuesta imaginarlo, me cuesta a mí misma, yo de niña, sabionda y descarada. Sin vergüenza alguna y sin tapujos al hablar. Veáse: insoportable. Así era, y me preocupaba muy mucho de que todo el mundo se enterara y le quedara claro.
Putada tras putada, y escarmiento tras escarmiento fui creciendo... en centímetros también.
Siempre he pensado que tengo mucho que agradecer, pero me pasa, que se me quedaba así sobre el papel, nunca he sabido concretar. Lejos de agradecer, siempre he tendido más a "echar en cara" (que nunca lo he hecho, pero sí que lo he pensado) o a rechazar, ciertos ideales, prejuicios o formas de vida que se me han inculcado, a rechazar la mujer de provecho que han querido hacer de mí.
Sin embargo, hoy me veo en la postura de, incluso, agradecer ésto, pues el hecho de oponerse a algo, es que me han dejado espacio para elegir, para rechazar, para valerme y para expresarles, que hay cosas que no, y hay cosas que sí. Estoy orgullosa, en parte, de ese saber aceptar, comprender y respetar que han tenido conmigo y con mis formas. De la educación, de los valores y del esfuerzo. De no perder la paciencia y de capear mi lengua de trapo.
Lo que soy y lo que han querido hacer de mí, la misma cosa pero separada a fin de cuentas. Y me pienso esto hoy, hoy que no han venido a dormir, hoy que tengo todo el espacio del mundo para hacer y deshacer a mis anchas... qué alguien me de pistas, de cómo hacer para que se enteren de que esta noche, en este preciso instante pienso en ésto, pienso en ellos y se me están saltando las lágrimas.

domingo, 31 de mayo de 2009

Que no hay viaje de placer que yo desee más hacer que a tu vida

Ahora que los días son largOO00oosss, más que nunca me faltan horas para pasarlas contigo. Ahora que desayuno al sol y salgo a correr de cortos, espero que no se nos sequen las ganas y que la luna pase de horarios, para que pueda poner, de una vez, a la noche de tiros largos.
Ahora que agarro el boli más fuerte que nunca para borrarme entre línea y línea las ganas de ti y de contigo (también de playa). Ahora que madrugo los domingos y no tengo resacas, ni contigo ni de ti.
Ahora que organizamos el verano... el título de este post lo dice todo.
¡On!

martes, 5 de mayo de 2009

Me he cansado de pedirle al sol que nos regalara la noche, y en un acto de rebeldía absoluta y vergüenza de mí y de mi poco poder de convicción, he firmado un pacto con las estrellas, para que nos dejen la noche a oscuras.
Me han dicho de esconderse detrás de la luna, pero caprichosa de mí, anoche he pensado en recogerlas una a una y esconderlas detrás de mi oreja para que cuando puedas vengas a buscarlas...
...una a una
...face to face
...place to place
...hand in hand

sábado, 2 de mayo de 2009

Al final de los finales, como en los cuentos de hadas y princesas, todo es más sencillo de lo que parece: quita de tu vida aquello que te duela. Pero, apáratalo antes de que te abrase y olvides para siempre cómo se siente el dolor cuando te hacen daño.
Arráncalo y luego haz con las manos un puñadito bien apretao y lánzalo lejos, todo lo que puedas. Como cuando las tardes a última hora, antes de que nos llamaran para la merienda-cena, nos veíamos en la orilla, donde solamente caben las verdades, y hacíamos ranas con las piedras redondas y lisas. Siempre buscaba las más meteorizadas, las más erosionadas, las más gastadas. Las que más se han golpeado las aristas y la vida, por eso se quedan así: redonditas, perfectas, gastadas... y, al final, bien parecidas.
Pues eso, lo que te decía, l á n z a l a s . L e j o s .



martes, 21 de abril de 2009

Small things ---> Big things

Llevo días intentando escribir algo bonito. Pasa, a veces, que nos hacemos la picha un lio intentándolo. Lo más bonito es que sea sencillo y no lleve florituras. Solamente hace falta un lapicero y una hoja de libreta cuadriculada con barbas:

BUENAS NOCHES.
QUE DUERMAS BIEN.
(esto debajo de la almohada)

domingo, 19 de abril de 2009

La vida, de nuevo, tras los ojos de una niña

Carmen no levanta más de metro treinta del suelo. Es una niña saladísima y tiene unos ojos azules preciosos. Es pequeña, pero más pequeño es su perro, es un perropatada en toda regla, le encanta tenerlo en el cuello… y echarle la bronca cada dos por tres porque no para de andarle con el pelo. Con razón, porque ella no para de hacerle perrerías.

Carmen sabe mucho de animales, sobre todo de caballos… su preferido es “Campanero” y ella misma les pone los nombres. Viene con su padre casi todos los fines de semana a cuidar de los animales. Ella no los cuida, pero habla un montón con ellos y se lo sabe todo… ¡todo!. Hoy me ha contado que tiene muchísimas ganas de conocer cómo saben los huevos que pone la mil flores… Hasta me ha tenido que explicar qué gallina era, inculta de mí que no sabía cuál, es la que tiene tres colores… blanca, negra y marrón, aunque ella no los viera; porque Carmen no ve.

A veces, me recuerda a mí de niña, me encantaba ayudar a mi padre en el campo, él segaba y yo le hacía los montones… aunque la mitad del tiempo me entretenía cogiendo mariquitas y haciendo perrerías a lo que fuera que encontrara.



¡Buena semana!


ITEM: Sí, siguen gustándome estas pedazo de pasteladas horteras.

jueves, 2 de abril de 2009

Llega sin avisar y como el que no quiere la cosa. Viene, cómo no, a revolucionarnos. Es así de chula la primavera. Y hacía ya bastante que no os contaba nada, que no me sentaba tranquilamente a escribir un ratillo. A escribir no, a contar, porque no os escribo: os cuento.
Os cuento que a mí, por ejemplo, me gusta escribir sola. Las miradas. Me imagino cómo me ven mientras escribo. Concentrada, apretando los labios con fuerza, como si por más que los apretara estuviera diciéndolo más alto. Y es que a veces, escribir es el único recurso para escucharse. Por eso, me gusta escribir sola. Porque estoy c-o-n-t-a-n-d-o mis cosas. Me las estoy contando.
Ya me estoy dispersando... os hablaba de la primavera. Me gusta la primavera, soy un bicho raro que se activa con el sol y los colores. No sé, es como un despertar, unas ganas locas de comerse el mundo. De disfrutar. Playa o montaña, da lo mismo mientras sea buena la compañía.

Me viene al pelo a mí la primavera. Ahora que empezaba a preocuparme por todo excesivamente y saturarme de mil millones de cosas. Y es que por qué no decirlo, me llega también un poco la pachorra. No es que empiece a dejar las responsabilidades a un lado pero si a simplificarlas, a reducir las preocupaciones a la mínima expresión.

A ver quién es la valiente que me aguanta en Junio... 

Pillen terraza al sol
Pachorra
Cevecita fresca y 
Sean felices, corazones

jueves, 26 de febrero de 2009

Constancia

La he añorado, sobre todo la emocional. Y la he detestado. También he roto con ella. Un día rompí con ella, rompí conmigo. Rompí con lo que era, o más bien con lo que quería o querían que fuera. Hoy no sé exactamente qué soy, sé quién soy y sé lo que quiero y cómo lo quiero.

Es duro. 

Es duro cambiar.

Es duro romper con la dependencia y depender. Es duro volver a empezar. Echar de menos, echar de más. La dependencia ata, la dependencia nos ancla el corazón a un puerto. Y en los puertos el mar no está bravo, La marea sube, baja. Las mareas son monótonas, pero a la vez nos desgastan .

Es, entonces, el corazón el que nos azota bruscamente.

El mar, el viento, el corazón… 

que más da, llámalo cómo quieras 

pero siempre hay que luchar contra alguno de ellos, Capitana. 

¿Tranquilidad aparente, entonces?

 He vivido, a calzador, en  la rutina emocional. Sin embargo, nunca he sido constante, ni capaz de hacer, ver, sentir siempre lo mismo. Voy a clase, nunca al  mismo paso, nunca al mismo ritmo y cuando puedo cambio el recorrido. Me pone nerviosa encontrarme todos los días con la misma gente. Termino memorizándome su ropa… creo que podría aproximar la hora a la que han salido de casa, si van tarde o hoy van sobrados de tiempo… por los andares, por los tempos, por el ritmo…

Y no quiero entender de ritmos, ni de tiempos, ni de zapatos, ni de pasos, ni de caminos, ni de callejones sin salida... nada de eso es necesario para entender que, basta una misma y un mar por delante para nadar, y nadar, y nadar, y nadar, y nadar ...

lunes, 9 de febrero de 2009

Que alguien le quite el polvo a la biblioteca y al bibliotecario porque así no se puede estudiar.

Ha sido un día de estos que desde que empiezan apetece parar el mundo, bajarse y patear para que llegue mañana. He salido de casa corriendo y sin desayunar, previa ducha con agua fría. Es decir, perfecto. No hay mejor manera de empezar el día. Mediano y sándwich de esosquesoncomovegetales pero nollevanatúnynotienenlechuga. En cuanto digo sand… el camarero ya está en la barra, porque siempre le pido lo mismo, así es la rutina. Y así me quedo yo, con el vegetal, el atún y la lechuga en la punta de la lengua. A partir de mañana, chispita, voy a llamarlos Chispita.

Me he leído El País. Porque la Nueva, el Comercio y el Marca los tiene siempre acaparados, la señora que lee todos los días El mundo deportivo. Me he fumado un cigarro y las ganas de estudiar. He ido a tomarnos el café, aclarado la garganta y vuelto a estudiar.

Para cuando había vuelto, ya había llegado Ella. Con toda su presencia. Es una mujer entrada en años, super seria y con ademanes de maja. Siempre se sienta cerca y mira, remira y vuelve a mirar. Me pone un tanto nerviosa y me pongo a pensar que igual conozco a sus hijas… La mañana se termina con unas cuantas cordialidades más, un par de sonrisas forzadas y un “que ganas tengo de conocerte pero no me atrevo ni a mirarte”.

A la tarde un poco más de lo mismo, pero tampoco demasiado. He estado con N, es una de esas personas, que SIEMPRE te sorprende y nunca sabes por dónde te va a salir. Siempre he pensado que era un niño atrapado en un cuerpo de hombre. 

He pensado en comprarle gogos a J, pero acto reflejo me he dado cuenta de que esta mañana he terminado el desodorante. No tenía más suelto, ni tiempo porque S me esperaba ya, para subirnos a casa.

viernes, 6 de febrero de 2009

¿Has estado alguna vez en la luna?


¿Por qué no miraremos más a menudo el cielo?

martes, 3 de febrero de 2009

Mi padre escuchaba a Perales. Recuerdo, como si se tratase de ayer mismo, las tardes de domingo cuando volvíamos a casa desde pueblo. De aquella no había autopista. El viaje se hacía eterno, por lo menos, por lo menos de una hora. Había que subir la Campa, ahora hay autopista y se atraviesa. Recuerdo que siempre me sentaba en el asiento de la izquierda, porque a la vuelta, desde la derecha se veía el precipicio y me daba miedo. Escuchábamos la radio, la radio o a Perales, cuando no pillábamos la emisora. Porque para llegar al pueblo había que dar muchas curvas. Ahora se va todo recto.

Recuerdo, a mi padre cantando. Con la voz de hombre interesante que pone, cuando canta. Recuerdo sus letras. Sobre todo aquella del Velero llamado libertad. Hablaba de despedidas. Hablaba de marcharse con lo puesto. De recorrer el mundo con lo puesto. De navegar. De mirar al cielo. De buscar formas diferentes de vivir. Hablaba de libertades. 

Han pasado años, y aunque ya he dicho, que lo recuerdo como si fuera ayer, me encantaría que ayer hubiera sido el día en que, ese mismo que cantaba a las libertades, que se iba con lo puesto, se quitara la corbata y le diera al "rewind" y al "play".

¿Cómo saber en qué momento dejamos de ser lo que fuimos?

viernes, 30 de enero de 2009

"Primavera anticipada"

He pasado tantas veces por ese lugar, a esa hora, en esa tesitura… que cuando me has sorprendido, diciendo que nunca habías estado… he gritado de la alegría por dentro. No creo que te hayas llegado a sorprender, de hecho diría que ni a inmutar, pero yo sí, y me ha gustado. Me encanta ese banco, justamente ése. En él, he sido hija, sobrina, hermana, prima, novia… he besado, jugado, he reído, he llorado y acariciado.

Y repasando todas esas cosas que he sido, que soy… me paro, me paro aquí mismo.

Me doy cuenta del estatismo dinámico de la vida, y me invento un palabro, así como quien ve llover. Me explico… dinamismo porque desde aquel entonces, desde aquellas primaveras con barquillos, de tardes con vestidos floreados, ha pasado 543645767854 veces diferencial de t, y hoy, hoy mismo, he vuelto al mismo lugar. Al  punto de partida.  Qué cómplice que ha sido todo este tiempo. No llevaba vestidos de flores, ni hemos comido barquillos, ni siquiera, era primavera…

Pero me adelanto, y te digo lo feliz que me hace que llegue y que pase, y que sea contigo.




Si se trata de soñar todos podemos

dime, ¿a quién le amarga un dulce?

miércoles, 28 de enero de 2009

Casualidades de la vida que, el otro día, alguien completamente ajeno a mi yo del día a día, a ése que somos cuando se nos quita la cara de tostón en clase, me dijo: “María, no puedes profundizar en todo, haz el favor de pasar cosas por alto. Va contra natura, pero inténtalo”. Pues nada, no puedo. Ni en el sentido puramente académico, ni en los demás.

Esa sensación de no tener ciertas cosas bajo control, genera en mí caos y desconcierto. Y el caos, es desorden… y en un sentido energético, entropía.

Lo he negado, por activa y por pasiva, no soy de ciencias, no soy meticulosa, ni exacta, ni precisa… pues aquí me tienes, cuadriculada y extrapolando leyes de la termodinámica para explicarme a mí misma. Para entenderme, de veras. Por otro lado, tampoco sería yo si no lo hiciera.


Después de todo, hoy, sólo pienso en ésto y sólo pienso en contigo:

Foto: Alejandro Castrillo 

¿Tiramos los dados?


Pd: http://web.me.com/castrillo/La_mesa_de_Castri/Yo.html


lunes, 26 de enero de 2009

Life actually

La vida cambia. La vida nos huye, la vida se esconde o se nos escapa de las manos. La vida es emocionante y si nos emocionamos, SOMOS, estamos vivos. La vida son las personas y las personas cambian, nos huyen, se esconden, se nos escapan de las manos. 

La vida me sorprende. Las cosas nimias me enamorar. La magia camina por la calle… girar una esquina, oír una palabra, tomar unas manos…  

Los duendes existen, las hadas se nos escaparon de los cuentos, los príncipes azules son de todos los colores, las nubes se mueven con los dedos y las estrellas bailan cuando no las vemos.


Las palabras forman parte de nosotros. 

Las palabras son maravillosas. 

Habla, lee, escribe, 

pero no las dejas quietas, 

porque solas no van a ninguna parte.

Entramos todos: tus palabras y tú.

¡Súbete que empezamos!


Capitana de los vientos